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En FarmaTopVentas, tu farmacia online en España, nos encanta el sol; es fuente de vida, nos llena de energía y de buen humor. Pero no nos olvidamos de que también es algo sobre lo que debemos educar a nuestros hijos. Desde pequeños deben saber que el sol que nos resulta tan agradable si se toma en exceso y año tras año puede generar serios problemas de salud.
Los bebés menores de 6-8 meses nunca deberían exponerse directamente al sol ya que su piel es muy sensible y aún no tiene la misma capacidad que un adulto de generar melatonina que protege nuestra piel. Por ese motivo las quemaduras solares son muy frecuentes y graves en niños tan pequeños.
Además, los bebés regulan mal el calor y se deshidratan con mucha facilidad. Por si fuera poco nuestra piel tiene memoria. El sol es acumulativo, las quemaduras solares que sufren nuestros hijos en un futuro pueden derivar en un problema grave de salud incluso un cáncer.
Los niños muy pequeños deben usar cremas con filtros físicos minerales. Los filtros físicos actúan como una pantalla reflejando la luz y protegiendo la piel de nuestros hijos de las radiaciones UVA y UVB. Estas fórmulas sólo contienen sustancias físicas minerales que son inertes y no interaccionan con el organismo de nuestro bebé, de forma que no pueden causarles alergias ni otras reacciones no deseadas ya que actúan como un escudo.
Su única desventaja es que son cremas más espesas que dejan la piel blanca al aplicarlas, aunque en la actualidad ya existen en la farmacia cremas protectoras solares con filtros físicos coloreadas que minimizan este problema.
El uso de este tipo de crema protectora está indicada especialmente para niños pequeños o personas con pieles muy sensibles, dermatitis o cualquier otro tipo de problema en la piel.
Es muy importante aplicarse el protector media hora antes de exponerse al sol ya que los fotoprotectores químicos tardan media hora en hacer efecto. En el caso de los filtros físicos esto no sería necesario aunque es mucho más cómodo y práctico aplicarse la crema antes de llegar a la playa.
Es recomendable repetir la aplicación aproximadamente cada dos horas y después de cada baño. No debemos escatimar con el protector solar, es importante aplicarlo uniformemente por toda la superficie expuesta al sol y en cantidad suficiente.
En niños es aconsejable el uso de gorros e incluso camisetas si van a pasar varias horas jugando al sol.
Disfrutemos con sentido común y disfrutaremos más.